Un tramposo causa a su pareja sentimientos de devastación, angustia e inseguridad. Hacer trampas siembra la semilla de la duda generando problemas de confianza irresolubles, sin importar cuánto se quiera arreglar la relación.


Si sospechas de la infidelidad de tu compañero, confía en un asesor psíquico. Puede ayudarte a darle sentido a todas las emociones que estás experimentando en un momento difícil.


Deja que te guíen hacia el perdón o te ayuden a seguir adelante.